El herpes oral, vulgarmente conocido como fiebre o calenturas, es una infección producida por el virus del herpes simple Tipo I (VHS I). Se trata de una de  las lesiones más frecuentes de la mucosa oral y en concreto de los labios. Podríamos afirmar que hasta un 90% de la población general ha tenido contacto con el virus en algún momento de su vida.

Generalmente, el primer contacto con el virus suele producirse en la infancia, por contagio con la saliva o con lesiones activas. Es lo que se denomina infección primaria y en la mayoría de los casos suele ser asintomática. Sin embargo, en un porcentaje reducido de sujetos produce una gingivoestomatitis herpética, con la aparición de vesículas orales, fiebre, escalofríos, fatiga y dolor muscular. Estos síntomas pueden durar entre 10  y 14 días, tras los cuales se produce la curación total.

Tras este primer episodio, el virus VHS 1 es transportado a través de los nervios sensoriales hasta los ganglios nerviosos (especialmente el del trigémino) donde permanece en estado latente, pudiéndose reactivar y viajar de nuevo por los nervios hasta los tejidos orales, generalmente los labios o la mucosa oral, encías y paladar duro, produciendo unas vesículas que se erosionan con mucha facilidad.

Entre los factores desencadenantes de estas reactivaciones se hallan la exposición solar, viento, estrés, bajas temperaturas, traumatismos, descensos de defensas, alteraciones digestivas y la menstruación

Las lesiones orales más características son las vesículas en ramilletes que se rompen con facilidad y forman pequeñas úlceras, especialmente en le mucosa oral . Si la lesión asienta en la mucosa labial  o perioral se produce con frecuencia la formación de una costra que constituye la etapa final  de la lesión antes de la curación (10 -14 días).

La prevención de esta infección es difícil.Sin embargo,  si el paciente es capaz de reconocer en las etapas iniciales los síntomas que preceden a la aparición de las vesículas, puede acelerarse su curación. Estos síntomas son el hormigueo, quemazón o picor en el  área perioral.

El tratamiento farmacológico se basa en el uso de antivirales tipo aciclovir ya sea en forma de cremas o bien, por vía oral en función de la gravedad de los síntomas . La aplicación de crema debe realizarse cada dos horas desde la aparición de los síntomas hasta la curación de las lesiones. Así mismo, debe de evitarse el consumo de alcohol, bebidas ácidas o carbonatadas y alimentos picantes. Se recomienda utilizar colutorios de clorhexidina cuando la higiene oral sea dificultosa.

Finalmente debe hacerse hincapié en la necesidad de una exhaustiva higiene de manos para evitar la transmisión de la infección. De igual modo, es importante evitar el besar a otras personas , especialmente niños, no compartir  cubiertos o productos labiales y atender los consejos del dentista.